Muchas son las incertidumbres que surgen en el momento de tomar la decisión de marcharse a trabajar al extranjero temporalmente. Quizás lo primero que se nos viene a la cabeza es el tema económico, las retribuciones, los temas fiscales y las prestaciones sociales.
Pero no cabe duda que en cuanto al llegar a casa se comenta la posibilidad del traslado al extranjero con la familia, surgen de pronto un sinfín de incógnitas de índole mas personal que sin duda hay que solucionar y para las que los departamentos de RRHH no suelen ofrecer apoyo alguno.
Y es que la expatriación consta de tres fases muy diferentes y cada una de ellas requiere de un asesoramiento y un apoyo específicos:
Fase 1: ¡Me voy al extranjero!
¿Qué hago con mi casa?
¿Qué necesito para inscribir a los niños en su nuevo colegio?
¿Puedo llevarme a mi perro?
¿Quién me hace la mudanza?
Fase 2: ¡Ya no estoy en España, me he instalado en mi nuevo destino!
Se va mi inquilino, ¿quién me ayuda a buscar a otro?
¿Cómo conseguir que me envíen mi partida de nacimiento legalizada?
¿Quién puede enviarme mis medicinas?
Se ha estropeado la caldera en mi piso ¿Quién puede solucionarlo?
Fase 3: ¡Volvemos a casa!
¿A quién acudo para que ponga a punto mi casa o me busque una para alquilar?
-¿Cómo se hacen las convalidaciones?
-¿Dónde puedo encontrar ayuda doméstica?
-¿Qué colegio imparte el Bachillerato Internacional?
Encontré por casualidad hace unos meses una empresa que se dedica precisamente a atender las necesidades de los españoles que residen fuera, acompañándoles desde que se marchan, mientras residen fuera y cuando regresan. Una idea basada en la experiencia personal de una de sus fundadoras como expatriada en distintos países durante mas de veinte años. Un servicio que va mas allá de lo que conocemos como “relocation”.
Su objetivo es minimizar los contratiempos que conlleva un traslado en cualquiera de sus tres fases y aportar con ello un doble beneficio, personal y profesional, tanto al empleado y a su familia como a la empresa para la que trabaja.
Envío desde aquí un abrazo a mis amigas de sinDemora agradeciéndoles su contribución en este blog dedicado al expatriado.
Aprovecho también para invitaros a todos a visitar su portal electrónico y su página en facebook que sin duda encontraréis de gran utilidad.
¡Ojalá las hubiera conocido antes de mi desplazamiento a Berlín!
Un fuerte abrazo amigas!